FOJI y el legado que impacta generaciones de músicos en la Región de Valparaíso.-

REGION DE VALPARAISO.- Consolidando su compromiso con la formación integral de niños, niñas, adolescentes y jóvenes del país, la Fundación de Orquestas Juveniles e Infantiles de Chile (FOJI) destaca la trayectoria de Ámbar Tobar, violonchelista de 22 años y de José Ignacio Arancibia, contrabajista de 20 años, ambos integrantes de la Orquesta Regional Juvenil de Valparaíso, quienes comparten su camino musical junto a FOJI y sus proyecciones a futuro.

Las historias de los becados reflejan la esencia del trabajo que FOJI desarrolla en todo el territorio nacional, promoviendo la equidad en el acceso a la educación musical sinfónica de excelencia y generando espacios de desarrollo artístico, social y personal. “Siento que FOJI otorga muchas oportunidades, independiente de dónde uno venga. Tenemos ensayos, profesores, becas. Es un ritmo muy parecido al profesional, y eso entrega herramientas que sirven para toda la vida”, señala Ámbar Tobar, quien ingresó a la orquesta regional en 2019.

Actualmente, Ámbar cursa cuarto año de Educación Musical en la Pontificia Universidad Católica de Valparaíso y se desempeña como profesora en una orquesta en Cabildo, provincia de Petorca, continuando un proceso formativo que define como: “un ciclo muy bonito. Uno entra a FOJI, aprende, recibe herramientas y luego puede transmitirlas a otros. Ahora soy profesora y me encanta ver cómo esa cadena sigue creciendo”. 

Durante sus años en FOJI, ha compartido escenario con músicos provenientes de distintas comunas y realidades de la región, valorando la diversidad etaria y formativa que caracteriza a la Orquesta Regional. “Es muy lindo crecer con tus compañeros, ayudar a los más pequeños y recordar cuando tú fuiste esa persona que recién empezaba. Hay un aire familiar, musical”, agregó.

En su último año como becaria, Tobar destacó el rol que la Fundación ha tenido en su desarrollo y proyección profesional. “La música y el chelo me cambiaron la vida. Si no hubiera tenido esta oportunidad, probablemente no habría podido estudiar. FOJI me abrió un mundo nuevo y me hizo entender que la música también es una profesión válida, que funciona y transforma vidas”, expresó.

FOJI no solo promueve el desarrollo musical, personal y social de sus becados sino que también es el punto de partida de un camino que entrelaza generaciones, aprendizajes y sueños. Así lo refleja la historia de José Ignacio Arancibia, contrabajista de 20 años y becado de la Orquesta Sinfónica Juvenil Regional Valparaíso (OSJR Valparaíso) desde el año 2020, quien llegó a la Fundación gracias a la motivación de su profesor en la Orquesta Infantil y Juvenil de Olmué. Ese mismo docente, ex becado de FOJI, recibió en su momento el impulso de sus propios maestros, mantenido viva la pasión por la música y el impacto de FOJI en los futuros artistas de la región a lo largo de los años. “Es como una cadena muy bonita. Mi profesor fue parte de FOJI, sus compañeros también, y hoy ellos transmiten esa experiencia a nuevas generaciones”, relata José Ignacio.

A lo largo de estos cinco años como integrante de la orquesta regional, José Ignacio ha experimentado un crecimiento artístico y humano significativo. Ingresó siendo un adolescente motivado por la curiosidad musical, y hoy es un joven intérprete con un profundo compromiso con su disciplina. FOJI le permitió enfrentarse a repertorios exigentes, conocer a músicos de diferentes trayectorias, fortalecer su técnica instrumental y aprender a trabajar en conjunto en contextos profesionales. Esta experiencia no sólo consolidó su vocación, sino que también le entregó herramientas de colaboración, disciplina y confianza que han sido clave en su desarrollo académico y personal. “Cada temporada ha sido un aprendizaje distinto. He visto cómo he crecido junto a mis compañeros y cómo la orquesta me ha acompañado en todo este camino”, afirmó el contrabajista.

Uno de los mayores valores que destacan los integrantes de la OSJR Valparaíso, es la empatía que se genera dentro de la orquesta. Jóvenes provenientes de distintas comunas de la región, como Olmué, Los Andes, Valparaíso, Viña del Mar, La Calera y San Antonio, se reúnen cada domingo para formarse y prepararse para sus conciertos de cierre que se llevan a cabo al final del año. En ese proceso se mezclan trayectorias, niveles y estilos, construyendo colectivamente un resultado artístico que trasciende lo individual. “Cada uno aporta desde su experiencia, y eso es lo más bonito: ver cómo todo se une para entregar lo mejor a la audiencia”, comentó Arancibia.

Para José Ignacio, quien cursa tercer año de Interpretación musical con mención en contrabajo en el Instituto de Música de la PUCV y su participación en FOJI se retroalimentan constantemente. “Lo que aprendo en la universidad lo aplico en la orquesta, y también aprendo muchísimo de mis compañeros, sin importar el nivel. Todos estamos abiertos a escucharnos y crecer juntos”. Este espíritu colaborativo ha inspirado sus mayores logros profesionales. José Ignacio ingresó a la universidad y hoy proyecta continuar sus estudios en el extranjero, impulsado por su experiencia en Olmué y FOJI. “Las cosas se pueden lograr con disciplina y amor”, afirmó.

Más allá del impacto artístico, la labor de FOJI en la Región de Valparaíso es ser un motor de transformación social y cultural desde los territorios. A través de la música, la Fundación contribuye al fortalecimiento del tejido comunitario, generando oportunidades de desarrollo integral que trascienden el ámbito individual y repercuten directamente en las familias y comunidades de sus becados y becadas.

FOJI invita a postular hasta el 15 de diciembre a través de foji.cl a todos los jóvenes que deseen participar en su convocatoria 2026 para integrar y ser parte de la gran experiencia que es pertenecer a la Orquesta Sinfónica Juvenil Regional de Valparaíso.

Sobre FOJI

La Fundación Nacional de Orquestas Juveniles e Infantiles de Chile, FOJI, se dedicada a promover el desarrollo social, cultural y educacional del país, brindando oportunidades para que los niños, niñas y jóvenes de todo Chile accedan a una mejor calidad de vida a través de la práctica musical de sus elencos; acercando la música de concierto a todas las personas, sin distinción.

Desde su modelo formativo, FOJI busca contribuir al desarrollo integral de los becados/as mediante el fomento de la práctica musical de sus elencos y enseñanza dentro de un marco de respeto y compromiso social, entregando una experiencia formativa caracterizada por ser activa y colaborativa, con acceso social y territorial, que procura las condiciones óptimas para el logro de los objetivos formativos.

Más información en www.foji.cl

FOJI cuenta con financiamiento del Ministerio de las Culturas, las Artes y el Patrimonio.-